Un año entre vosotros
Querida familia parroquial, el próximo 5 de junio Dm., cumpliré un año entre vosotros. No puedo más que dar gracias a Dios por estos intensos doce meses, y decir con el salmista “me ha tocado un lote hermoso, me encanta mi heredad”.
Gracia a Dios y a todos vosotros por la cristiana acogida que me habéis dado, Dios os lo pague. Tengo muy presente a los anteriores párrocos (José Ignacio, Javier, Florentino) pues la realidad hermosa que vemos en la parroquia, es fruto de sus muchos desvelos y trabajos. “Porque en esto resulta verdadero el refrán de que uno es el sembrador y otro el segador: yo os envío a segar donde vosotros no os habéis fatigado. Otros se fatigaron y vosotros os aprovecháis de su fatiga”. (Jn 4, 37-38). Quiera Dios que las fatigas presentes sean cosecha que otros recojan el día de mañana.
En este domingo de Pentecostés escucharemos a san Pablo que nos dice: “Y hay diversidad de carismas, pero un mismo Espíritu; hay diversidad de ministerios, pero un mismo Señor; y hay diversidad de actuaciones, pero un mismo Dios que obra todo en todos. Pero a cada cual se le otorga la manifestación del Espíritu para el bien común.” Nuestra parroquia es una familia, grande, hermosa, con variedad de carismas… no tengamos miedo a abrirnos al Espíritu Santo. El crea armonía en la diversidad. Sin Él, la diferencia es división y la unidad uniformidad.
Una vez más, gracias familia.
¡Ven Espíritu Santo!